Desde la Sociedad Cultural Cubano Andaluza José Martí mostramos nuestro total y absoluto rechazo a la reciente decisión del actual presidente de EEUU, Donald Trump, de volver a incluir a Cuba en la infame lista de supuestos países patrocinadores del terrorismo.
Esta medida, materializada en las primeras horas del regreso de Trump a la Casa Blanca, cuando ni tan siquiera había transcurrido una semana desde que el presidente saliente, Joe Biden, anunciara que Cuba dejaba de formar parte de dicha arbitraria e ignominiosa lista, parecería un mal chiste si no fuera por el gran coste, en términos humanos y económicos, que supone para el pueblo cubano.
Y es que la pertenencia de Cuba a esa “lista negra”, en la práctica, se traduce en severas restricciones económicas, financieras y diplomáticas para la nación caribeña, además de la prohibición de exportaciones, la suspensión de ayuda económica, el bloqueo de créditos internacionales y cuantiosas limitaciones para acceder al sistema financiero global.
La acusación de que Cuba es un estado terrorista no tiene ninguna base racional ni sostén legal o jurídico que se precie, se mire por donde se mire. Muy al contrario, la Revolución Cubana ha sido y es reconocida internacionalmente por su compromiso con la paz, su humanismo y su solidaridad internacionalista, algo que ha quedado evidenciado, por ejemplo, cada vez que ha brindado ayuda humanitaria o enviado brigadas médicas allá donde se les ha necesitado.
Estamos, por tanto, ante un nuevo acto de agresión del Gobierno de EEUU contra Cuba que, lejos de pretender combatir el terrorismo, sólo busca recrudecer la guerra económica que la primera potencia mundial lleva imponiendo a la mayor de las Antillas desde hace más de seis décadas a través de innumerables acciones unilaterales, sanciones coercitivas y un genocida bloqueo económico, comercial y financiero, que ya ha sido condenado en numerosas ocasiones por la Asamblea General de las Naciones Unidas. Todo ello con la vana esperanza de provocar algún día un estallido social en la isla que desemboque en el fin del sistema socialista cubano.
Si hubiera justicia en este mundo, Cuba nunca debería haber figurado ni un minuto en esa arbitraria e ilegal lista de países patrocinadores del terrorismo. Pero no sólo eso, sino que su único promotor, EEUU, debería ser el que la encabezara a tenor de su propio y sanguinario historial de injerencias externas, intervenciones militares ilegales, golpes de estado, apoyo a regímenes criminales…
Por todo ello, desde la SCCA José Martí nos sumamos a las voces que se alzan en estos momentos para repudiar la reincorporación de Cuba en una lista donde jamás debió aparecer y para exigir tanto su exclusión definitiva de la misma como el levantamiento del bloqueo y de todas las medidas coercitivas unilaterales. Asimismo, reafirmamos nuestra solidaridad con el proceso revolucionario cubano y con el derecho de ese pueblo hermano a su libre determinación y soberanía.
Del mismo modo que estamos convencidos de que, a pesar de las adversidades, Cuba no se va a dejar doblegar ni cejará en su empeño por recuperar su economía, tenemos claro también que la solidaridad con la mayor de las Antillas va a seguir incrementándose a lo largo y ancho de todo el planeta. Cuanto más se le agreda y bloquee, mayor será el respeto, la simpatía y el apoyo que la Revolución Cubana continuará despertando entre los pueblos que luchan por su libertad y la justicia social.
Ahora más que nunca, ¡Viva Cuba Socialista! ¡Hasta la victoria siempre!