Un nutrido grupo de cubanos residentes en Sevilla y amigos de Cuba en Andalucía nos hemos concentrado este viernes en la capital hispalense para honrar el 171 aniversario del natalicio del Héroe Nacional de la Mayor de las Antillas, José Martí.
Organizado por el Consulado General de Cuba en Sevilla, el acto se ha desarrollado en la céntrica plaza de Cuba, donde se encuentra ubicado un busto dedicado a José Martí.
Diversas asociaciones del movimiento de solidaridad con Cuba en Andalucía (SCCA José Martí, Bartolomé de las Casas, Alhucema…), junto a la Asociación de Cubanos Residentes Tocororo y organizaciones políticas, como el PCE o IU, se han sumado a este acto, cargado de simbolismo, en el que se ha rendido tributo a esta figura cimera de la historia americana, quien por la universalidad de su pensamiento y por sus trascendentes aportes en el campo de las ideas, la educación, la cultura y la literatura, constituye una personalidad de alcance mundial.
Nuestro presidente, Daniel García, ha sido el encargado de depositar, junto a la Cónsul de Cuba, Irelia López, una ofrenda floral a los pies del monumento erigido al Apóstol.
Acto seguido, Irelia López se ha dirigido a los presentes con unas breves y emotivas 
palabras. En su intervención, la diplomática cubana se ha referido a Martí como «el principal inspirador de la Revolución y de nuestra concepción política, la guía hacia la resistencia y la victoria, quien en su corta pero fecunda vida nos enseño de humanismo, ética, moral, solidaridad, latinoamericanismo y antimperialismo».
En este sentido, la cónsul de Cuba ha reivindicado la vigencia de las ideas de Martí, asegurando que en estos tiempos «es imprescindible aplicar su pensamiento y estudiar su obra». «Honrar a Martí es levantar nuestro voz para denunciar el bloqueo a Cuba, pero también lo honramos y pensamos cuando defendemos la lucha del pueblo saharaui por su autodeterminación o cuando exigimos que se ponga fin al genocidio en Gaza», aseveró.
Finalmente, la actividad ha continuado en la sede del Consulado de Cuba, donde se ha celebrado una velada cultural, ya con un tono menos solemne y más lúdico, y en la que no han faltado los sones del Himno Nacional de Cuba, la lectura de algunos de los versos más célebres de Martí, así como la buena música cubana y los bailes.
